El origen de la energía de la biomasa puede ser tanto vegetal o animal y, a su vez, puede haber sido obtenida de manera natural o mediante transformaciones artificiales que se realizan en las centrales de biomasa.
Aunque el material más utilizado es la madera, ya sea en forma de pellets, serrín, astillas o restos, la materia prima de la biomasa está presente en residuos forestales (limpieza de montes), residuos agrícolas (podas de los cultivos), residuos agroalimentarios (subproductos y residuos de procesos de la industria alimentaria y ganadera) y, aunque parezca extraño, en la basura que generamos en las ciudades.